Las casas de madera son sinónimo de construcción sostenible, a diferencia de las convencionales de ladrillo o de hormigón tradicional. La madera es un material que procede de la naturaleza, no perjudica al medio ambiente, a la vez que es biodegradable. Si quieres saber más sobre los beneficios de estas casas y las ventajas que proporcionan, te recomendamos seguir leyendo.
¿Qué tipos de casas de madera existen?
El mercado de las casas de madera está en auge en los últimos años. De la misma manera que la gente se preocupa cada día más de la eficiencia energética y la sostenibilidad apostando por la energía verde o formas de autoconsumo, también siguen estas directrices en la construcción de su hogar.
Así, estos son los tipos de casas de madera más destacados:
- De troncos: Se llevan a cabo directamente con los troncos de madera colocados sobre las parcelas. El grosor de estos actúa como elemento aislante, regulando la humedad e impidiendo que el calor residual se escape.
- De entramado pesado: Un poco más complejas de construir que las anteriores. En este caso se necesita poner ensamblajes entre las vigas para que todo quede perfectamente sujeto. De esta forma, se pueden crear grandes cristaleras.
- De entramado ligero: Es la más empleada, siendo las casas canadienses su principal reflejo. En este caso, las piezas de madera son esbeltas y delgadas, lo que facilita la prefabricación y la modulación.
- Modulares: o también denominadas móviles, se construyen en varios módulos y se transportan en piezas muy grandes hasta que se ubican definitivamente.
Dentro de esta categoría también se emplazan las llamadas casas pasivas. Estas se construyen siguiendo los estándares de eficiencia energética del instituto Passivhaus alemán. En este tipo de viviendas, la construcción parte con el objetivo de conseguir una buena calidad del aire y reducir al mínimo el consumo de energía; un propósito que también se puede lograr comparando las ofertas energéticas o apostando por las tarifas verdes.
¿Cuáles son las ventajas de las casas de madera?
Entre las ventajas de las casas de madera y la construcción sostenible destacan principalmente las económicas y medioambientales. Su construcción puede suponer reducir las facturas de luz y electricidad drásticamente:
- La madera actúa como aislante, de manera que mantiene una temperatura fresca en verano y una confortable en el invierno. Esta característica contribuye a generar una mayor eficiencia energética y, por ende, a catalogarla como una vivienda sostenible.
- Ahorro en las facturas energéticas: Los expertos estiman que con una construcción de madera se puede reducir entre un 50 y un 60% el consumo anual de calefacción y aire acondicionado.
- Requiere de menos energía que las viviendas de hormigón y de ladrillo.
- Los materiales que se emplean para su construcción proceden de recursos naturales, son 100% ecológicos y, por supuesto, no derivan del petróleo.
- Gastos: su construcción puede llegar a ser un 30% más barata que las viviendas convencionales.
- Poco mantenimiento: Muchos de los materiales que se utilizan para el revestimiento de la madera, como son las lanas o el algodón, requieren de un mantenimiento casi mínimo. Sumado a ello, la madera, si se conserva bien, tiene una larga vida útil.
¿Cuáles son los mitos de las casas de madera?
Uno de los falsos mitos de las casas de madera es que tienen poca durabilidad. Aproximadamente, las casas de hormigón presentan ya bastante deficiencias pasados los 40 años mientras que hay casas de madera que se conservan en perfecto estado de revista hasta los 200.
Sumado a ello, no son más propensas a los incendios. En cualquier vivienda, la mayoría de los fuegos se originan por causas externas a los materiales y lo que se quema son los objetos personales, no el exterior. De igual manera, sí que es verdad que la madera prende rápido, pero a unos ritmos que permiten apagar las llamas sin que acabe todo convertido a cenizas.
Edgar Fernández
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