Desactivar tu fuerza.

Cuando los hombres se nombran, se citan, ponen apellidos dobles a sus escritos, cuentan de sí mismos.
Cuando vienen a hablar de su libro, a contarnos con un yo por delante como soldado principal.
Cuando narran sus vidas, conocimientos, batallas como si fueran LA VIDA, sus historias como LA HISTORIA y los textos griegos clásicos en donde no había mujeres como modo de ilustrarse no hay parpadeo alguno al otro lado.
Esta forma de ocupación del espacio simbólico y del conocimiento la conocemos.
Un yo que observa el mundo atomizado y desde una supuesta autoridad legítima.
Pero si una mujer se cita, pone su nombre detrás de sus escritos, se toma a sí misma como referencia creíble de algo que conoce muy bien, de experiencias propias encarnadas o de estudios sesudos de años, cuando una mujer toma la palabra y cuenta lo suyo o lo común se está haciendo auto bombo, es pretenciosa, peca de ego referencia o de autoinflamiento.
¿Pero tú quién te crees que eres para mirar de frente, contradecir con argumentos, denunciar que opiniones personales masculinas se conciben como ciencia, gritar contra el machismo campante en la mayoría de los espacios y ámbitos?
Haz el favor de ir sutilmente detrás de los hombres y de su discurso y respeta.
Pero hazme saber también que no te sientes incómoda y que vamos juntos de la mano.
Que no se te note la desigualdad.
Que no se te note ni la sintomatices.
Que no la nombres.
Que no te nombres como individua.
Y mucho menos que hables de mí, señor.
Que cuando lo haces estás siendo egoica, luchadora de más, poco respetuosa o vives en la amargura.
Deja tu lucha en la puerta de todos los lugares en donde es imprescindible y baja el tono.
Desactívate suavemente y únete al masculino genérico.
Ese que siempre te ha dicho cómo tienes que vivir, sentir y estar en el mundo.
Subsumida, sin nombre y sin mirar de frente.
Buen día, otro día nombrándonos.
María Sabroso.
Obra de la artistaza Esther Ferrer.
María Sabroso.
Sobre María Sabroso 112 artículos
Sexologa, psicoterapeuta Terapeuta en Esapacio Karezza. Escritora

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