Manuelita Saenz

Como  en tantas ocasiones hemos visto al investigar sobre la vida de esta mujer nos encontramos con un tratamiento injusto y vejatorio de  la historia hacia un personaje  excepcional habiendo llevado una vida novelesca y de  gran importancia en el contexto nacional en que se movió.

Manuelita Saenz de  Vergara nació un 27 de Noviembre en Quito, hija ilegitima de un hacendado español, casado y de una criolla, hija de españoles. Muere la madre al poco de nacer Manuelita de unas fiebres puerperales. El padre la confina en un convento al cuidado de unas monjas, las   Conceptas. Pronto se dan cuenta de que posee un talento especial, es despierta e inteligente, por lo que el padre decide enviarla a estudiar idiomas y recibir formación en labores domésticas en el Monasterio de Santa Catalina de Siena. La traslada a la Casa Grande (domicilio familiar de Saenz) donde su mujer legal,  Juana del Campo Larraondo, la cuida y educa como a una hija. Manuela desarrolla un amor filial por su hermano de padre, José María Saenz y entabla amistad con las negras Natán y Jonás, hasta el final de su vida.

Desde niña tuvo un carácter independiente y rebelde. Recibe a los pocos años el impacto de ver un ajusticiamiento de rebeldes por las tropas realistas españolas. Además de ajusticiarlos, pusieron sus cabezas colgadas por diversos puntos de la ciudad como escarmiento al resto de rebeldes. Manuela,   sale a hurtadillas de su casa para escuchar a las mujeres independentistas que se reunían en el domicilio  de Manuela Cañizares, de la tomó ejemplo, convirtiéndose en ferviente independentista y luchando por la causa. En esas reuniones están mujeres de luchadores e hijas y esposas de rebeldes, además de la citada Cañizares, están Manuela Espejo, Josefa Tinajero, Mariana Matéu, Rosa Zárate, María Larraín, Antonia Salinas,  Rosa Larrea, Manuela Quiroga, Josefa Escarcha, entre otras, incluyendo monjas.

Manuelita va forjando su irredentismo en contra de la corona española a fuerza de ver las injusticias que se comenten de forma habitual,hasta convertirla en una rebelde convencida, incluso ese sentimiento la enfrenta a su padre.

A los 19 años,  su padre concierta un matrimonio con un médico inglés adinerado, James Thorne, que la dobla la edad. No fue capaz de amarle, al contrario, su presencia la inspiraba una notable repulsión en el escaso tiempo en que se mantiene junto a él.

Se dice que se implicó en el independentismo al conocer a Simón Bolívar; fue al contrario, conoció al Libertador debido a su  ideología. Amiga y colaboradora del general Sucre, para el que había realizado tareas de espionaje con notable éxito, participa con éxito en la liberación de Perú en donde reside con su marido James Thorpe.

Descubre que su marido la engaña con una amante anterior a su matrimonio, con la que tiene dos hijos, le abandona y regresa a Quito.  Había conocido antes al  General Sucre con el que la une una gran amistad colaborando con él en la liberación de Ecuador por la batalla de Pichincha.  Saenz entregó a la causa dinero, muebles, trabajó  cuidando enfermos y heridos en la batalla.

Manuelita Saenz  es una mujer independiente que no se atiene a ningún convencionalismo social, separada del marido, entregada a la causa libertadora y de carácter rebelde, un día está contemplando desde un balcón la llegada a Quito del Libertador. Le arroja una corona de flores  con la intención de que caiga  a los pies de su caballo pero atina justo  en el pecho de Bolívar. Avergonzada comprueba como el héroe  levanta los ojos y la saluda llevando la mano al sombrero. Esa misma noche le conoce en una fiesta que dan  en su honor dando comienzo a una relación amorosa, pasional, amistosa, de admiración y confianza mutua que duraría hasta la  muerte de Bolívar, ocho años después.

En Lima, junto a la guayaquileña Rosita Campuzano, arriesgó su vida para filtrar información sobre los avances del independentista argentino José de San Martín, del sur hacia Perú y de Bolívar desde el norte. Por estas acciones ambas fueron galardonadas con la Orden del Sol del Perú y se les  concede el grado de Caballeresas del Sol.

Manuelita Saenz decide vestir el ropaje militar, a despecho de los convencionalismos sociales de la época, y participa junto a Bolívar en las batallas emprendidas por el Libertador. No es una mera decoración amorosa en la vida del héroe sino que ella misma defiende con armas el ideario libertario  que movía a los rebeldes participando con gran bravura en los combates.

En la batalla de Ayacucho participa de  forma valerosa, tanto que se le concede la graduación de Generala del Ejército.

En una ocasión detecta de forma intuitiva una traición de los colaboradores de Bolívar encabezados por Francisco de Paula Santander, que intentan asesinar al Libertador cuando éste duerme. Son interceptados por Manuelita,  que se interpone entre ellos,  permitiendo  que Bolívar escape por una ventana. A partir de entonces sería llamada Libertadora del Libertador.

Ambos se amaron profundamente, compartieron ideales, lucha y amistad, tanto que al cabo de los años de su muerte, Manuelita expresa al historiador O,Leary: “vivo lo adoré, muerto lo venero

A la muerte del Libertador por una hidrocefalia, Manuelita se sume en la desesperación por su falta. Poco después, en 1834,  el gobierno de Francisco de Paula Santander, no olvidando su heroica participación en el descalabro del atentado contra Bolívar, la destierra a Colombia,  después marcha a Jamaica donde también es despreciada por el gobierno. Al final es confinada en la zona norte de Perú, en Paita;  regenta una mísera tienda donde vende tabaco. Para sobrevivir tiene que ser traductora, escribir cartas para los balleneros americanos, hacer dulces y bordados. Es visitada por notables libertadores como Giuseppe Garibaldi, escritores como Ricardo Palma y Simón Rodríguez.

Durante los siguientes 25 años vive proscrita y olvidada, hasta morir a los 59 años en una epidemia de difteria. Es enterrada en fosa común, sus pertenencias quemadas por temor al contagio, incluidas las cartas de amor que la envió Bolívar y diversos documentos de la Gran Colombia.

Años antes entregó al historiador O, Leary parte de los documentos que sirvieron para elaborar la biografía de Simón Bolívar.

El personaje de Manuelita Saenz, ha sido calumniado y ninguneado como mera amante del Libertador, menoscabando una personalidad tan rica y la enorme dedicación que entregó a la causa de la libertad.

Pocos han sido los historiadores que han dado lugar a esta singular mujer. En 1980 Carlos Alberto Saá dio a conocer sus diarios y la correspondencia entre ella y Bolívar conociéndose de esa forma la talla de la mujer.

A lo largo de los últimos años se han sucedido homenajes en América Latina. El 5 de julio de 2010, en el marco de la conmemoración del 199.° aniversario de la firma del Acta de Independencia de Venezuela, llegó al Panteón Nacional un cofre que contenía tierra de la localidad peruana de Paita, donde fue enterrada Manuela Sáenz. Estos restos simbólicos fueron trasladados por tierra atravesando Perú, Ecuador, Colombia y Venezuela hasta arribar a Caracas, donde reposan en un sarcófago diseñado para tal fin junto al Altar Principal en el que yacen los restos de Simón Bolívar. Además, a Sáenz se le concedió póstumamente el ascenso a Generala de división del Ejército Nacional Bolivariano por su participación en la guerra independentista, en un acto que contó con la presencia de los presidentes de Ecuador y Venezuela.21

En 2013, el gobierno de Venezuela inauguró un monumento a Manuela Sáenz denominado Rosa Roja de Paita. El 5 de julio de 2010, en el marco de la conmemoración del 199.° aniversario de la firma del Acta de Independencia de Venezuela, llegó al Panteón Nacional un cofre que contenía la escultura de 14 metros ubicada justo al lado del Mausoleo de Simón Bolívar, en Caracas.22

 

En estos momentos se emite en Neflix una serie sobre Simón Bolívar donde el personaje de Manuela Saenz recibe un trato equitativo.

 

 

María Toca

 

Sobre Maria Toca 1673 artículos
Escritora. Diplomada en Nutrición Humana por la Universidad de Cádiz. Diplomada en Medicina Tradicional China por el Real Centro Universitario María Cristina. Coordinadora de #LaPajarera. Articulista. Poeta

Sé el primero en comentar

Deja un comentario