Siempre que acometemos la biografía de una mujer en la época de principios del siglo XX sentimos el dolor y la impotencia de vidas truncadas por el conflicto civil español. Son mujeres pioneras, rompedoras, inteligentes que se desgarran entre el exilio y el dolor de ver perder sus ideales, su patria y su familia. Todo esto es llevado al paroxismo en el caso de Carlota O, Neill por las terribles circunstancias vitales que le tocaron vivir y la saña con que los hechos acaecidos en el 36 marcaron su vida.
Nació en Madrid un 27 de Marzo, de 1905, hija de familia de alta burguesía, culta e ilustrada, rompió con los condicionantes de su clase abriéndose a las ideas progresistas que impulsó la Revolución Soviética. Su padre, Enrique O, Neill, diplomático mexicano de origen irlandés y su madre Regina Lamo, colaboradora de Lluis Companys, Carlota es tía de Lidia Falcón. Participe, como tantas mujeres de su época de los movimientos liberadores que impulsaron la II República, propugnó un feminismo liberador y el amor libre, comenzando a escribir muy pronto.
Conoció a Virgilio Leret, de ideas progresistas como ella, formando pareja sin casarse, teniendo dos hijas de su unión. Más tarde las circunstancias y presiones familiares les hicieron claudicar de su unión en libertad y contrajeron matrimonio. Leret era un apasionado de la aeronáutica, capitán de Aviación. Llegó a inventar un motor de aviación cuya patente le fue concedida un dos de Julio de 1935. En Junio de 1936 comenzaron a realizarse los modelos de pruebas en los talleres aeronáuticos de la Hispano-Suiza. Sus proyectos sufrieron vicisitudes desgraciadas víctimas del levantamiento militar del 36. Sirva como ejemplo el hecho de que tuvo que ser su hija, Carlota Leret O, Neill la que pagó de su bolsillo el prototipo que se expone en el Museo de Aviación.
Carlota O, Neill fue amiga de Federica Montseny, Victoria Kent, y todas las Sinsombrero moviéndose entre el Lyceum Femenino y en los círculos progresistas y feministas que propiciaron la II República, aunque no tuvo una participación política directa fue afiliada de Izquierda Repúblicana . Desarrolló una labor de difusión cultural importante durante ese tiempo en el teatro, que tal como hiciera Lorca con su Barraca, consideraba que la difusión literaria y teatral era la mejor arma de culturización del pueblo y por tanto de su liberación.
El verano de 1936, Carlota, Virgilio y sus dos hijas, pasaban el verano en una batea atracada en Melilla, Cumplen con ello un sueño que Carlota le había expresado a Virgilio: vivir en el mar. Residen en el barco y salen de vez en cuando a la ciudad, a jugar al tenis, a comer o a estar con amigos. El 17 de Julio por la tarde está el cielo nublado, él lee en una hamaca mientras ella escribe dentro del barco, las pequeñas juegan cerca de ambos. Se escuchan unos tiros, Leret es capitán con ideas republicanas y progresistas, por lo que entabla un tiroteo con los golpistas, siendo detenido al poco tiempo por un teniente rebelde al ser derrotado en la escaramuza.
Le trasladan a tierra y la familia será la última vez que le vea. Poco después un alférez, amigo, llega a fin de rescatar a Carlota que es conducida, junto con la criada de la familia, Librada y las pequeñas hijas, a su casa, donde residen un tiempo de forma discreta. No sirve de nada su ocultación ya que son detenidas ambas, Carlota y Librada, pasando al Fuerte de la Victoria Grande. Las niñas son conducidas, bajo la tutela de su suegro, a un colegio inhóspito para niñas huérfanas donde pasan frío y hambre.
El suegro de O, Neill, militar conservador, la culpa del “desvío” ideológico de su hijo y de su posterior fusilamiento. Tiene la tutela de las niñas mientras Carlota vive confinada en una cárcel terrible. Poco antes de ser detenida, comienza a escribir el libro más importante de su vida, que luego reescribirá ya que lo quema mientras los integrantes de Falange aporrean la puerta para ser detenida. En él cuenta el hambre, el hacinamiento, la miseria que pasa en esa cárcel. Está mezclada con prostitutas y delincuentes comunes en la prisión; lo que comienza siendo un libro personal pasa a convertirse en un relato coral en donde se desmenuza todo el horror de la prisión franquista. En la cárcel se entera de que su marido ha sido fusilado y las niñas trasladadas al colegio fuera de la ciudad. Sufre una crisis nerviosa, llegando a insultar a los carceleros lo que le acarrea un nuevo consejo de guerra. Durante cinco años sigue prisionera sin tener contacto con sus niñas que continúan bajo la tutela del suegro, confinadas en el terrible colegio. Fue absuelta por falta de pruebas pero, quizá las artes del suegro o las malas formas del franquismo, la mantienen confinada durante cinco años en esas duras condiciones.
Cuando sale de prisión lucha enconadamente en reunirse con las niñas, lo cual consigue pero sin obtener la patria potestad. Se traslada con ellas a Barcelona, viviendo en la más absoluta precariedad. Escribe para vivir, hace literatura de subsistencia pero mantiene la calidad de una gran escritora. No puede firmar con su nombre ya que sigue proscrita y utiliza el seudónimo Laura Noves. La penuria de postguerra, siendo una represaliada y perseguida por el odio de su suegro, a la muerte de su madre es tan grande que decide exiliarse, invitada por un amigo, en 1949 a Venezuela con las pequeñas. La enorme decepción sufrida al ver que las potencias ganadoras de la II Guerra abandonan a su suerte a los demócratas españoles también le impulsa a tomar esa decisión. Siente que no tiene nada que hacer en un país donde la dictadura se asienta con la conformidad internacional.
Poco después de llegar consigue trabajo en prensa, radio, incluso en televisión, trasladándose de nuevo a México de donde es su padre. Se asienta en ese país refugio de tantos españoles huidos, desarrollando su vida literaria plenamente. Reescribe el libro de memorias carcelarias, titulándole: “Una mexicana en la guerra de España” , ve la luz en 1964. Los estudiosos de su literatura nos confirman que es lo mejor de su obra. En España se publica en 1979 (Turner). Tiene publicado también una obra poética bellísima “Romanza entre rejas” escrita, como la anterior, en la cárcel. Realiza obras de teatro: “Circe y los cerdos”, “Cómo fue España encadenada”
La obra de Carlota O, Neill no debiera padecer el olvido que la mantiene en desconocimiento ya que tiene un gran valor, así como su persona. Fue una mujer adelantada a su tiempo, inteligente, valiente y rompedora, tan solo fue abatida por una triste historia que destrozaron su familia y su vida. Su ideario progresista así como el feminismo que practicó toda su vida, le hacen merecedora de un reconocimiento popular del que carece.
Murió en Caracas, donde residen sus hijas, en el año 2000. Sus cenizas fueron esparcidas por la cima de Popocatepetl.
María Toca
Hay muchos errores en este artículo que no deja de tener buena intención, pero ahí va: primero no se llamaba Laret sino LERET. Segundo, Carlota nunca perteneció al PC. Tercero: su marido no fue detenido, sino que defendió la base de Hidros donde era el jefe, con pocos hombres, frente a los sublevados, hasta que tuvo que ceder y dejar las armas. Cuarto: la mantuvieron detenida gubernativa el primer año, pero luego fue juzgada por un consejo de guerra por las 17 cuartillas encontradas que empezó a escribir cuando empezó la sublevación. Quinto: no decidió irse a Venezuela, la invitó su amigo Mario Arnold por carta.
En fin, muchos datos erróneos pero vuelvo a repetir, con buena intención.
Gracias por sus puntualizaciones, Libertad. Nos hemos documentado sobre lo que encontramos publicado y digitalizado porque desgraciadamente una escritora y personaje de la talla de Carlota no es conocida en nuestro país. Corrijo el texto no sin invitarle, si le parece, a hacer un artículo sobre ella, si tiene conocimiento más amplio de Carlota. Un abrazo y gracias por su lectura y por sus apuntes.
Querida María, me encantaría. De hecho, me estoy encargando de la recuperación de Carlota, porque es injusto que una mujer tan adelantada haya sido olvidada completamente, como tantas otras
Estoy de acuerdo…creo que hay que recuperarla por muchos motivos, el literario el principal por supuesto, pero también creo que es importante recordar a personajes tan injustamente tratados por la triste historia de nuestro país. Libertad, cuenta con nosotras para publicar cuando y como quieras. Carlota se lo merece y me parece maravilloso que haya personas como tú que se encarguen de su difusión. Un abrazo, Libertad.
Os respondo ya con mi verdadero nombre. Pronto tendréis ediciones de Carlota gracias a Renacimiento y a Cuadernos del Vigía. Y en cuanto a la oferta, encantada de colaborar con vosotras. Abrazos
Que gran alegría Rocío…por favor, nos informas en cuanto salga la edición. Y si te apetece preparar alguna reseña, la publicamos sin dudarlo.
Este artículo incurre en mentiras y calumnias de tal forma que procedería a una demanda
1º Carlos Leret Úbeda estuvo al servicio del Gobierno Republicano con el rango de coronel dirigiendo el Centro de Reclutamiento y Movilización nº1 que se encargaba de la coordinación del entrenamiento y de la llegada de refuerzos. El resto de la familia luchó, como Virgilio, en el lado republicano
2º Carlota O’Neill no se exilió. En el archivo histórico consta el conocimiento del Régimen Franquista de la situación de Carlota.
3º A Carlota le reducen la pena al colaborar en el semanario franquista Redención. Más tarde, la hermana de Carlota, Enriqueta, trabajaría para la censura de la mano de José Bernabé Oliva.
https://lerethispania.blogspot.com/2018/05/carlota-oneill-no-fue-al-exilio.html
Querido Manuel. La biografía realizada a Carlota O, Neill se hizo con la documentación contrastada y publicada de forma común. Ni soy investigadora ni se pretende en esta publicación hacer gala de ello. La graduación del señor Leret padre no se cuestiona porque no me consta. El lado del que luchó la familia de Virgilio tampoco se dice en el artículo pero sí afirmamos porque es publico y conocido la animadversión que tenía hacia su nuera y lo que tuvo que luchar esta para recuperar a las niñas. Tiene usted videos publicados por una de sus hijas donde lo afirma totalmente, están en la red, puede buscarlos y demandarla también. En cuanto al no exilio de Carlota…vamos, querido Manuel, usted sabe perfectamente como era la España de entonces y claro que tuvo que trabajar en donde y como pudo, y que su cuñado la ayudó publicando en Redención (no se incluyó en el artículo como tantas cosas porque, reitero, no es una biografía, es solo un artículo y la extensión cuenta) Por otro lado, eso no es en absoluto prueba más que de la abyección del régimen, porque no se si sabe que una madre para dar de comer a sus hijas puede y debe hacer cosas terribles, el problema es de la sociedad que la pone en esa tesitura. Y por eso Carlota se fue, porque debió sentirse muy asqueada de lo que usted apunta.
En cuanto a demandar al magazine, no seré yo quien se lo impida, pero hombre…¿no tiene usted empresas mayores? ¿No tiene usted más cosas que hacer que acusarnos de forma tan falaz? Un saludo querido Manuel y gracias por su lectura de esta humilde revistilla que parece que llega a su mayoría de edad con sus amenazas. SyR.
Y muy bueno lo de aprovechar nuestro magazine para publicitar su blog. Queda invitado a realizar un artículo rebatiendo el nuestro, es así como se hacen las cosas entre colegas y correligionarias, no con amenazas. Reitero saludo.
Por último, decir que lo que hay en el Museo del Aire no es un prototipo… es una maqueta ya que ella no tiene los cálculos. Sólo tiene la documentación existente en el Registro de Patentes.
Y otra mentira más. Laura de Noves no estuvo proscrita por el Régimen Franquista. Sólo hace falta buscar en la hemeroteca digital en los años 40 entre la prensa del Régimen.
¿Por que en vez de utilizar la palabra mentira no hace un favor al idioma y dice inexactitud? Quizá la mala fe o las ganas de notoriedad hacen mella en usted. Mentir es engañar con intención…Y no es el caso. No presuponga usted, señor Manuel, he podido equivocarme o tener fuentes inexactas…Si es usted tan experto corrija y publicite la obra de O, Neill pero no se le ocurra insultar ni amenazar como lo hace. Y esta vez sin saludo.
Releyendo mi artículo me produce sonrojo la interpretación que da usted a lo que digo de Laura Noves…Repase señor Manuel, y si tienen un mínimo de comprensión lectora se encontrará con que expreso de forma clara que Laura de Noves es el nombre que utiliza Carlota para publicar ¡por supuesto que está en las hemerotecas ! porque tuvo que evitar su nombre en esa sociedad tan «cordial» Y publicar en la prensa del Régimen en esos tiempos era normal. Toda la prensa era del Régimen. Por último decirle que si pretende blanquear los momentos de oscuridad sufridos por Carlota no es sitio https://www.lapajareramagazine.com para ello. Quizá la historia en general y lo vivido por esa desgraciada familia le desmientan. Por mucho que les pese a la familia Leret. Gracias de nuevo. SyR.
Querida María, ni caso. Este señor es un pariente de los leret y solo hacen que calumniar a Regina, Carlota, Enriqueta y a las hijas de Virgilio. En mis investigaciones ya he visto todo tipo de argumentos absurdos para desacreditar, como el del propio Carlos Leret. En fin, no hagas caso, y si hay querella, no te preocupes, es publicidad para el magazine. Aprovecho para decir que no van a parar de echar querellas bien pronto, ya que las ediciones que se anuncian no les va a gustar.
Me he dado cuenta por el apellido. No es fácil cambiar la historia…imagino que saben que no es para sentirse orgullosos. Una pena. Saludos y gracias Rocio.
Solo puedo decir una cosa, porque las otras son absurdas, tanto que publicamos sobre ellas (¡con documentación incluida! algo que echamos de menos aquí). Orgullosos estamos, porque de lo que no podríamos estar orgullosos es de hablar bien de un franquista y responsable de la censura
https://elalminardemelilla.com/2013/02/24/carlota-leret-oneill/#comment-12966
Tanta mentira había en el artículo que se tuvo que editar varias veces. Es comprensible, tantas versiones diferentes que vienen de la misma parte son difíciles de sostener.
Las últimas nuevas ediciones han sido reediciones… pero bueno, tenemos paciencia para combatir las mentiras como ya hicimos en el Museo del Aire obligándoles a reconocer que Virgilio fue fusilado y el grado otorgado por el gobierno legítimo. Que unos «mintamos» y los demás produzcan tantas «inexactitudes» ya resulta sospechoso.