(Hoy).
Cultiva cada instante del día
para crecer, para ser feliz
asegurando tus sueños entre las manos.
*Intenta domar el desaliento.
Sigue en el camino del derecho a expresarte,
es una necesidad y un deber.
Sigue buscando tus ansias de convertir
esta existencia en algo extraordinario, tú puedes
cambiar poco a poco este mundo
porque eres fuerza y constancia.
*Rebosas pasión;
no te importe que la vida
tenga vaivenes, caídas, triunfos,
porque eres la única protagonista.
*Si las tormentas te detienen,
piensa que tu labor en ese esfuerzo
aportará sabiduría.
No gastes tu tiempo culpando a otros,
pierdes ritmo y no rima, y… ¡sigue!
*Sigue soñando porque los sueños liberan. Y llegan.
Sigue, aunque yerres.
No te sumerjas en el silencio,
porque el silencio atemoriza, destruye y entierra.
Si es necesario, huye…
Tú sabes que hay otros caminos. Que llegarás.
*Valora lo sencillo, lo habitual, en cada paso que des
sobre adoquines o sobre algodones.
Escríbelos en tu alma.
Son la auténtica poesía de la vida.
*Sigue confiando en ti porque todos
nos merecemos sentir, estar y ser.
No hacerlo, involuciona la vida en caos.
*Vive con ilusión esa vida por venir,
disfruta con intensidad, sin medias tintas,
con los ojos muy abiertos.
*Eres el futuro en presente,
una misión de orgullo
sin necesidad de aplausos ajenos
porque estarás satisfecha de ti misma.
*Llama a las puertas de quienes puedan enseñarte
porque, quien se alimentó del saber, sabe instruir.
Cierra tu puerta, con dos vueltas de indiferencia, a necedades y burlas
porque son ignorantes y te temen.
*Así lucha la “Poesía” y, hoy, esta poesía
se llama MUJER.
Ángeles Sánchez Gandarillas©
Fotografía –Amelia Sánchez Gandarillas, Abre los ojos.
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