LIVE AND LET LIVE
-No sé cómo decírselo.
-¿El qué?
-Que no me gusta, pero sin hacerle daño.
-Eso es muy difícil. Le vas a hacer daño con cada respuesta que le des, y si no le das ninguna el daño va a ser en slow motion.
-Ya lo sé, pero yo no quiero hacérselo, o no quiero sentir esta culpa por tener la sensación de estar haciéndoselo.
-Olvídalo. Esto es como andar entre cristales rotos. Tú ya puedes querer salir sin un rasguño del tema, pero por más que tomes preocupaciones acabarás pisándolos.
-Y el caso es que no te duela.
-No, el caso es que no chilles demasiado.
-¿Entonces que…? ¿me alejo de él?
-Un tiempo quizás. Eso cura. Dentro de unos meses os reencontráis, tu habrás fichado a alguien y él es posible que también. Él te podrá mirar de otra forma, tú no tendrás miedo a no mirarle.
-Igual me manda al cuerno.
-Lo cual es otra solución.
-¿Sabes? Cuando ya lo llevo mirado un rato, como que me cuesta aún más decirle que no siento nada por él.
-¿No dices que no te gusta?
-No es lo mismo.
-Aclárate.
-No es tan fácil.
-Ya veo tu rollo. Quieres lo que menos te salpica de él a cambio de que se pierda por el camino lo que realmente te incomoda. Te puedo entender, es lo que todos querríamos cuando nos sucede algo así.
-Quedarme por pena con él no lo voy a hacer.
-No deberías hacerlo, no me imagino nada peor que estar sin estar con alguien…bueno, me lo imagino porque he aguantado diez años así.
-Es que esto no debía haber pasado. Funcionábamos perfectamente sin mezclar. Nos gustábamos sin dependencias. Me hacía gracia y yo le ofrecía chispa, o conversación, o algo que ahora no sé lo que es pero que…
-Yo tampoco.
-No es fácil conservar amigos.
-Deja de llamarle así. No le haces bien, y a ti tampoco.
-¿Y cómo le dirías tu que se haga a la idea…que no?
-Sin muchas explicaciones o excusas. No las necesita. Solo quiere que le trague la tierra. Ayúdale a cavar un rato y te vas.
-No entiendo.
-Que se lo digas y te esfumes. Sin llamadas, sin promesas, sin plazos. No tocan.
-Ya…
-Y hazlo cuanto antes. Le harás un favor.
-No, claro…
-¿Claro qué?
-Lo que has dicho antes. No sé si me gustaría encontrármelo después con otra.
Texto: Jean Boucicaut.
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