Días selváticos son lo que necesitamos. Días de andar descalzos, de mirarnos desde el otro lado.
Días de no pasar frío porque en todo existe abrigo. Días de sorpresas, de mariposas, de sentir las gotas de lluvia en la boca. De besar sapos, de pasar el rato, sin más, sin menos, solo lo necesario.
No hablar de amor, hacer el Amor. Y despeinarnos, sin juzgarnos.
Mirar lo salvaje es lo que necesitamos. Y reconocernos en ello pues también somos animales bellos. Deslizarnos al interior de la Tierra donde el misterio nos espera.
Días seguidos de noches que los complementan. Y en ellas…
Buscar cocodrilos que nos hacen vibrar el ombligo. Escuchar el eterno sonido que recuerda el primer latido. Y estar presentes, muy presentes, acompañados de la vida latente.
Días y noches naturales es lo que necesitamos. Días de más miel, noches de más piel.
Texto y fotografías: Silvia Maza
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