Cataluña duele©

Duele. Por eso casi ni leo ni opino. Duele mucho. Pero creo que es inevitable. Un cúmulo de errores de juegos malabares mezquinos e interesados, han conseguido desgajar a una población que jamás tuvo problemas, que convivió en paz y formó lo mejor, lo más moderno, lo más libre, de la sociedad española o catalana, como quieran, que no es hora de herir susceptibilidades.

Me duele, aunque temo que ya  es inevitable. No sé lo que será Cataluña sin nosotros, espero que cumplan sus sueños creando ese estado idílico de libertad, igualdad y fraternidad por el que luchan, aunque algo me dice, que se deshincharán los sueños como  hicieron los nuestros. Es lo que tiene no ir al fondo de los problemas, cambiar un estado por otro, cambiar un gobierno de estultos y ladrones por otro similar. Si no van al origen, si no cambian las estructuras, algo me dice que serán similares a lo que son ahora,  pero más pequeños. Juro por todo lo que amo que les deseo el triunfo porque de esa forma algo nos tocará, algo podremos imitar. Y porque les quiero. Pero soy escéptica, lo siento.

 

Lo que imagino es lo que será España sin Cataluña: un poco más triste, más casposa, más gris. Sin  vosotros, queridos, sin ese bastión de la esquina oriental, se nos queda una España resabiada, escorada hacia una derecha ultramontana. Sin vosotros, nos quedaremos más mudos. Sin la riqueza de ese bello idioma que adorna el léxico con mesura y color mediterráneo. Nada va a ser igual, me temo,  porque a los que creemos en el progreso y en la modernidad, nos arrancáis el brazo izquierdo. Y duele.

 

Me duele que se vayan, pero no pienso perder ni un minuto en quitarles el derecho a irse, a dejarnos, a quitarles la palabra. Me divorcié de quien no quería,  abandoné casas y territorios en busca de otros que creí mejores y ese mismo derecho les asiste a ellos. Irse si quieren. No voy a perder un minuto en invocar  esas leyes en contra de escuchar a un pueblo, porque la democracia es acomodaticia o no es. Las leyes están al servicio del ciudadano, no al revés. El buen político, sabe nadar entre los vericuetos de las leyes para adaptarlas al momento. Como se hizo en la Transición. Como se hizo tantas veces que convenía (¿a quienes?)

Cuando se pide hablar, votar, en este caso, hay que escuchar, porque la política es eso: escuchar al adversario, pactar sin que se note mucho, llegar a acuerdos. Los pagamos para que lo hagan y lo que hicieron fue caer en el frentismo demagógico porque les convenía. A ambos estados. Si hubiera  que cambiar la ley, o la Constitución, se debiera hacer (que se hizo en otras ocasiones, con nocturnidad y alevosía, no nos rasguemos tanto las vestiduras) Que debió hacerse hace mucho.

Es altamente probable que si se hubiera votado hace tiempo, los partidarios de quedarse, serían más. Es posible que con un estado federal, solidario pero autogestionado, esta ruptura no se hubiera producido. Es posible que con un poco de buen sentido, menos demagogia y malas artes la situación caótica que padecemos hubiera quedado en mera anécdota. Para eso hacen falta políticos de altura, generosos, con miras en la sociedad o en pasar a la historia, no inmundos politicuchos enfangados en sobres B, Gurtell o Liceos y Andorras esperpénticas. Se echa de menos a un Tarradellas, junto con un Suárez, que podríamos no tener nada en común, ideológicamente hablando, pero se les reconoce la talla. Más que nada por comparación a lo presente.

 

Hoy, me temo, es tarde. Se ha quebrado la confianza, el dialogo entre ambas comunidades, que  eran una sola,  parece que tristemente  se ha roto . Es difícil la equidistancia porque los puentes los reventaron a base de insensateces y malos modos.

Están en su derecho, no lo dudo,  lo que no quita para  que me duela mucho. Tan solo espero poder  seguir caminado por esas Ramblas amables, plenas de color y ruido. Quiero seguir sintiendo el aroma de pino, mar y aire caliente en el Cadaqués soñado, contemplar hasta quedarme muda la Sagrada Familia y pasear por el Parque Guell, hasta perderme de mi misma. Porque amo a esa tierra como si fuera la mía. Porque lo es.

 

María Toca

Sobre Maria Toca 1673 artículos
Escritora. Diplomada en Nutrición Humana por la Universidad de Cádiz. Diplomada en Medicina Tradicional China por el Real Centro Universitario María Cristina. Coordinadora de #LaPajarera. Articulista. Poeta

8 comentarios

  1. Pienso que hemos llegado a un callejón sin salida del que solo podían haber encontrado l a luz al final del túnel los propios catalanes, los que quieren irse y los que no lo desean, estos últimos, que no sé si son más que los que quieren marcharse o son menos, da la impresión que han dejado su destino en manos de los políticos de fuera de Cataluña, que error, que inmenso error, solo ellos habrían podido desactivar este divorcio.
    Desde fuera, tengo la sensación que los que quieren marcharse son mayoría, si no es así, ¿que hace esa mayoría silenciosa que no desea la independencia? ¿El silencio de los corderos?

      • No estoy de acuerdo en todo aquello que se refiere a que ya no hay solucion y estoy de acuerdo en parte con el resto.
        No estoy de acuerdo porque si en 20 años los independentistas le han dado la vuelta a la situacion, hasta la mitad de la poblacion o menis, en 10 años se puede corregir.

        Tampoco estoy de acuerdo en que habia que haberles dejado votar. Es un error. El independentista que pierde vuelve a plantear elecciones continuamente siempre con el mismo argumento hasta que salga el resultado que quiere.

        No pienses en un divorcio, piensa en una comunidad de vecinos. La ley que rige la convivencia en una finca, establece que para una reforma importante del inmueble se necesitan los votos de todos. A ver si para 20 vecinos va a existir mas cordura que para unos cuantos millones

        • Mi artículo era una opinión personal dolorida. Espero que tengas razón, y se encuentren soluciones pero detecto una quiebra en la convivencia que espero se subsane.Si creo que hay que pactar un referéndum, se hizo en Escocia, en Quebec y mire el resultado. En Cataluña ha habido mucho error interesado, mucha política rastrera, pero hay que oír al pueblo, regulando y pactando.Un saludo y gracias por su colaboración en @LaPajareraMgzn

  2. Una ley de presupuestos se puede sacar adelante con mayoría simple. Al cabo de un año vence y se puede volver a hablar. Una ley de independencia es para siempre (o para mucho tiempo) y no se puede aprobar con una mayoría exigua. La mayoría del Parlament no es la mayoría de los catalanes, la ley de Ohm, tan injusta, no se invoca ahora, las decisiones importantes se toman por 2/3, tal como indica la ley que ahora se ignora.

    Supongo que es el intento a la desesperada del ahora o nunca.

    Lo cual no dice que estemos de acuerdo con lo que hay. La culpa la tiene el gobierno de Madrid que nos ha hecho llegar a donde estamos. Son tan ineptos los unos como los otros y que no piense Mariano que resuelve el problema simplemente prohibiendo el referéndum. El mal ya está hecho

  3. El PP con su prepotencia,su negación al diálogo y ninguneo a Cataluña,ha hecho más separatistas que los cuarenta años de dictadura.Dicho esto,estamos asistiendo a la representación de una obra de teatro cuyo final ya conocen sus intérpretes,la burguesia catalana y la del resto del estado.Pase lo que pase el 1 de octubre,ambas saben que no habrá ruptura;pero habrá servido para aumentar sus votos en sus respectivos feudos,y enfrentar un poco más a los ciudadanos españoles y catalanes.Los intereses de clase de ambas burguesias seguirán seguros y con buena salud,los de los trabajadores un poco más precarios.

    • Posiblemente, esté en lo cierto, Tomás, ambas facciones juegan a lo que les interesa, la fracción y crispación producida es algo poco importante para ellos. Una pena que se juegue con el sentimiento del ciudadano.Saludos y gracias por su aportación a @LaPajareraMgzn

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