George Sand

 

 

Que maldición condena a infinitas mujeres con  talento, que han desarrollado obras importantes, que como hayan tenido alguna relación sentimental con hombres también conocidos, quedan marcadas como meras parejas de…o musas del famoso, obviándose su obra por más talentosa que haya sido.

Es el caso que hoy traemos. Quizá en Francia se de a esta mujer, conocida universalmente por su seudónimo, la importancia debida,  pero en el resto de los países se la  nombra más por los hombres a quien amó que por si misma.

El uno de julio de 1804, nace en París una niña cuya madre es tabernera por lo tanto de  clase popular, Sophie Victoire Delaborde y su padre,  Maurice Dupin de Franmeil, un aristócrata mariscal de campo del ejercito napoleónico, cuya madre era hija natural del rey de Polonia. Le ponen el nombre de Amandine Aurore Lucie Dupin, que les dirá poco, y más tarde recibió el título de Marquesa de Dudevant. Al poco tiempo de nacer la familia viene a España siguiendo los pasos del mariscal Dupin, que está a las órdenes de Napoleón invadiendo nuestro país.

La muerte de un hermano cuando solo contaba cuatro años y poco después de su padre, que muere por una mala caída del caballo marcan su infancia. La madre, en mala relación con su suegra, se traslada a Paris con la pequeña, pero la marquesa, madre de Dupin, negocia con la progenitora con el fin de quedarse a la pequeña y ser educada en la mansión familiar. a Marie-Aurore de Saxe, madre de Dupin, es una mujer culta, liberal, amante de las artes,  educará a la pequeña Amandine en libertad con tutores que la preparan incluso en conocimientos de anatomía y de cirugía. Poco después la interna en un colegio inglés atendido por monjas en donde completa su formación y es feliz puesto que no le imponen reglamentos estrictos. La abuela muere cuando ella tiene dieciséis años,  quedando concertado un matrimonio que se lleva a cabo  cuando Amandine tiene solo diecisiete años.

No le desagrada su marido, en principio. Incluso confesará en cartas que tienen buenas relaciones físicas, pero conforme pasa el tiempo, el barón Casimir Dudevant, muestra un carácter irascible, ser gran bebedor, pendenciero que ama la caza y los prostíbulos careciendo de ambición cultural. Amandine ha tenido un hijo, y no es feliz en absoluto. En una de las separaciones matrimoniales envía una misiva al esposo de veintidós páginas, donde muestra sus exigencias para mantener el matrimonio y la fidelidad que ya comenzaba a flaquear. Es evidente que el marido no acepta los puntos impuestos por Amandine, por lo que, a pesar de haber recibido la herencia de su abuela, que según las leyes de entonces, es gestionada por su marido, la joven marcha a París con su hija, Solange, ya que el barón sospechaba que no era suya,  mientras el pequeño Maurice queda al cuidado del padre. En París, Amandine y la pequeña viven de forma humilde en una buhardilla. Ella ha comenzado a escribir, habiendo conocido a un joven escritor, Jules Sandeau, con el que forma pareja sentimental y laboral. Ambos escriben a dos manos, por lo que la primera novela salida de la colaboración,  es firmada como J. Sand. La relación ha comenzado estando aún en el domicilio conyugal. Amandine, relata en una de las 25.000 cartas que escribió a lo largo de su vida, que Jules, ha entrado en su cuarto de forma solapada, han tenido una noche de amor, de donde sale magullada, con marcas en el cuerpo y apenas sin poder andar, pero inspirada y estimulada para escribir. Es excepcional, para la época, la libertad con que refiere sus escarceos sexuales sin mostrar vergüenza ni disimulo.

En París, comienza su tarea  periodística como colaboradora de Le Figaro,  mientras sigue escribiendo de forma compulsiva. Publica su primera novela escrita solo por ella, Indiana, donde habla de la infelicidad matrimonial, incluso se atreve a mostrar la insatisfacción sexual femenina, lo que supone un gran escándalo, que no impide el éxito de  la novela. Una mujer en ese tiempo no podía escribir y si lo hacia su literatura era despreciada como romántica o ridículamente femenina, para evitarlo, Amandine, comienza a usar el seudónimo de George Sand, nombre masculino que oculta la procedencia de su obra. Ella detesta ser considerada una mujer débil, quiere escribir como lo hacen los hombres, vivir en total libertad y para ello es imprescindible tomar las apariencias masculinas en toda su vida.

La relación con Jules hace agua porque, según confiesa en cartas, es muy vago. Apenas  escribe; es ella la que asume la manutención y la responsabilidad de la vida en común. Escribe a su amigo Balzac, confesando sus problemas con Jules. Balzac, compadecido le ofrece un puesto como secretario,  poco después escribe a Amandine, dándole la razón. Jules es un vago con el que no pueden hacer nada.

George Sand comienza una carrera fulgurante. Trabaja de forma compulsiva, además de mantener una intensa vida social en París, donde  conoce  y se hace amiga de  Franz Liszt, el pintor Eugène Delacroix, el escritor Heinrich Heine así como Victor Hugo, Marcel Proust, Honoré de Balzac, Julio Verne y Gustave Flaubert con todos ellos se relaciona de igual a igual y conforma sus novelas en base a las experiencias vividas  en la ciudad.

Las mujeres no pueden andar solas por París, ni entrar en los cafés donde se reúnen los artistas que a George le interesa conocer. Recuerda que el preceptor que tuvo de niña en la casa de la abuela, le aconsejó vestir como un niño para tener libertad de movimientos, y George Sand, se hace confeccionar una levita, pantalones y camisas masculinas. Amparada en la nocturnidad, sale de casa embozada, caminando con la cabeza baja, hablando suave para no ser descubierta  comienzando sus andanzas con atavíos masculinos que la proporcionan la libertad que ansía. No es un disfraz, ni tan siquiera una excentricidad, es pura necesidad de ser y caminar por donde quiere . Además de ello, fuma en público, cosa inverosímil  en una mujer en la época, pero no para un hombre.

La casa de Nohant y el patrimonio heredado de la abuela sigue gestionado por el marido, por lo que ella emprende pleitos con el fin de  conseguir recuperar lo que es suyo, así como la custodia de sus hijos. Los jueces terminan por darle la razón, de esa forma el  patrimonio torna a sus manos. Para entonces su fama es completa en toda Francia, sus ideales republicanos y socialistas impregnan parte de su obra, y conoce al que sería su segundo amante importante.

Alfred de Musset, es quizá el poeta más  famoso de Francia, tienen veintitrés años, varios menos que ella;  es mujeriego, alcohólico, ha hecho incursiones con el opio y muestra una gran admiración y ganas de conocer a George Sand, ya que ha leído su novela Indiana que la ha sorprendido.  Emprenden un idilio tormentoso, en donde ella cuidará de él, le impulsará a escribir y le salvará de los excesos que el poeta comete de forma imprudente.

Emprenden un viaje como pareja, en donde ella enferma, él al principio la cuida,  poco después se aburre y comienza a salir de noche tornando a la disipación. George Sand, se recupera y es él quien enferma de tifus. Sand,  le cuida con mimo durante la enfermedad pero la relación no le hace feliz y terminan rompiendo definitivamente, después de varias reconciliaciones y riñas ruidosas. Musset es un hombre amable y encantador en la calle, mostrándose  tiránico, celoso y maltratador en familia. Le termina abandonando con dolor, y en un arrebato corta sus cabellos de forma irregular…Delacroix la retrata con el cabello deforme recién cortado . Al año siguiente, 1836, Alfred de Musset publica la novela cumbre del romanticismo francés “Confesión de un hijo del siglo” que le dedicará a ella.

Amandine, aunque tiene amantes y convive con ellos, siempre mantuvo a sus hijos con ella, es una gran madre y no deja de escribir ni un solo día. Su vida es actividad constante. En una fiesta convocada por una amiga, la condesa  Marie D’ Agonelt, conoce a Chopin, al que causará mala impresión puesto que va vestida de hombre y él la ve masculina y antipática y ella a él, como un petimetre  femenino. Esa primera impresión cederá a la  admiración que siente Sand,  hacia el artista polaco y no tanto de éste hacia ella.

Chopin, está enfermo, mantiene una tuberculosis desde hace tiempo que le hace toser continuamente  y se muestra débil. Vuelve a sentir Amandine, la necesidad de proteger a un artista que admira, cuidarle y cubrir sus necesidades para que siga componiendo. Tal como ha ocurrido con Alfred de Musset, ella asume los gastos de la convivencia, con su trabajo y la fortuna recibida de la abuela.

La familia marcha a Nohant, donde espera que Chopin se reponga y componga en la tranquila vida campestre. Él de carácter tiránico e inestable del artista, quizá producto de su enfermedad vuelven a ser un grave problema para la convivencia. Chpin, apoya en discusiones familiares a la díscola Solange, frente a su madre, que sigue trabajando y produciendo su enorme obra literaria, así como colaborando en diversas publicaciones con artículos de opinión política y social. George Sand, mantiene un republicanismo y un socialismo que le hace apoyar a las clases trabajadoras y luchar contra la monarquía a pesar de su familia aristocrática. No olvida que su madre era hija del pueblo, todo lo contrario que Chopin, ya que procede de una familia aristocrática polaca y su ideario es más conservador.

Decide venir a España con él y sus hijos,  instalándose en Mallorca huyendo del frío París, con la idea de que el clima de la isla sea curativo para el artista que ha empeorado. Justo ese invierno no para de llover en la isla, por lo que la enfermedad del artista empeora. Su estancia en Mallorca no es feliz, tal como refleja en su obra “Un invierno en Mallorca” la belleza del paisaje es incuestionable, pero  la maledicencia de una población que los critica sin piedad, le hace difícil la vida.

Se trata  una mujer  extranjera, vestida de hombre, que fuma y escribe, viviendo con un joven con el que no está casada…que toca el piano a todas horas, molestando a la población autóctona. Todo ello contribuye a que la población autóctona los haga la vida imposible. Tanto que  abandonan la casa donde residen y marchan a la Cartuja de Valldemosa, donde los monjes les dejan unas habitaciones.

Pasado el invierno, regresan a París y, harta del carácter negativo y tiránico de Chopin, termina abandonándole. La información vuelve a proceder de las  cartas enviadas a las amigas confesando que siente que es solo es una madre para el pianista…”llevo siete años viviendo como una virgen y creo merecer algo más”  Palabras que vuelven a  demuestrar la modernidad de una mujer que no quiere renunciar a ninguno de los atributos de su cuerpo,  reconociendo los problemas que aquejan a su relación sin resignarse. Para entonces, George Sand, tiene cuarenta años.

Ha tenido varios amantes que no pueden considerarse parejas, incluso, se dice que ha mantenido una relación con la actriz Marie Dorval, con la que mantendrá una gratísima amistad durante toda la vida, incluso a la muerte de Dorval, Sand, se hace cargo de los nietos de la actriz. También tiene una relación con Prosper Merimée.

En la madurez la llega el que fue, quizá, el gran amor de su vida, aunque nunca sea destacado por la historia, debido a ser el único que la cuidó, no vivió de ella -al contrario puesto que la ayudó con sus deudas- y no formó escándalos durante su feliz convivencia. Se trataba del pintor y grabador Alexander Manle, amigo de su hijo y como sus parejas anteriores, bastante más joven que ella. Vivieron felices y en paz durante quince años, hasta que Alexander murió en sus brazos . La descripción de su muerte que realizó Sand poco después de ocurrir, es  un texto bellísimo.

En la revolución antimonárquica de 1848 George Sand, apoyó firmemente a los revolucionarios, escribiendo y criticando la represión posterior. En cambio, al declararse años después, la Comuna de París, critica acerbamente a los revolucionarios. Quizá  ocurre que George Sand ha envejecido y no entendió las nuevas formas de levantamiento popular y lo que esa revuelta supuso para las clases proletarias.

Llegó a conocer a Bakunin, manteniendo  correspondencia con él así como con Marx. Se mostró contraria al voto femenino porque consideraba que la mujer debía empezar por formarse desde pequeña, adquirir cultura y conocimientos para de esa forma mantener criterio a la hora de votar.

Su obra muestra tres formas de influencia. La primera época,  mantiene unos textos plenos de idealismo y romanticismo. La siguiente fase contiene un cierto misticismo y está influida por el ideario socialista. Por último, al final de su vida, realizó sus obras más logradas, con temática campestre, debido a que se había refugiado en su casa familiar lejanos los tiempos de la vorágine parisina. Su escritura se tornó más serena, manteniendo la gran calidad de siempre.

Escribió casi cien libros, innumerables artículos y tal como dijimos 25.000 cartas que en gran parte se han publicado y han servido a los estudiosos, no solo para conocer su vida y obra, sino para determinar los usos y costumbres del siglo XIX puesto que George Sand, es una hábil escrutadora de la sociedad que la rodeaba.

Todo ello, antes de morir de un cáncer a la edad de setenta y dos años, en su casa de Nohant, rodeada de nietos, y de amigos.

Es triste que se conozca a George Sand, por su relación con Musset y con Chopin siendo como fue una de las más grandes autoras de la literatura europea.

María Toca Cañedo©

Sobre Maria Toca 1630 artículos
Escritora. Diplomada en Nutrición Humana por la Universidad de Cádiz. Diplomada en Medicina Tradicional China por el Real Centro Universitario María Cristina. Coordinadora de #LaPajarera. Articulista. Poeta

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