Luisa Carnés.
Casi todas las mujeres que hemos biografiado, han sido hijas de la alta burguesía por pura lógica. Si la cultura estaba vedada a las clases populares cuanto más siendo mujer al estar preconcebida su vida como criadora y cuidadora de la prole. Algunas de las mujeres que admiramos han tenido una dura lucha contra la sociedad, la familia y la ideología patriarcal para hacerse valer su capacidad, en muchos casos nos encontramos con el dolor de verlas enclaustradas en psiquiátricos, en conventos o desahuciadas de una sociedad que las mira como a monstruos o como enfermas por el solo hecho de tener talento. Cada biografía a la que me enfrento me hace pensar cuantas se quedarían en el camino, cuantos genias se malograron por no tener la fuerza suficiente para enfrentarse a la sociedad…en la mente me asoma el genio desaprovechado de Ángeles Santos Torroaella, de Camille Claudel https://www.lapajareramagazine.com/camille-claudely de tantas.
El caso de Luisa Carnés es diferente, no por no tener que luchar por abrirse paso, que también, sino porque su familia no pertenecía a la burguesía. Nace Luisa, en un barrio pobre de Madrid un tres de Enero de 1905, hija de trabajadores, su padre era barbero y practicante y su madre sastra. Es la mayor de seis hijos, la madre debe abandonar su trabajo para cuidar de la prole realizando tareas de lavado de ropa para otras familias con el fin de sobrevivir. Carnés, abandona los estudios a los once años. Debe trabajar para colaborar en el mantenimiento del escuálido hogar. Amar la lectura, tener ansias de aprender y cierto talento, casa mal con la penuria económica y Luisa sacia su sed de lectura con los folletines baratos que encuentra a su paso. Lentamente descubre otros autores que la llena más, Dostoievsky, Tolstoy, hasta llegar a Cervantes. Va conformando en el desorden de la autodidacta su formación literaria.
Su primer trabajo es de sombrerera, en un taller regentado por una tía suya. Siente un choque tremendo al contemplar y ser sujeto activo de las duras condiciones laborales de las mujeres de aquel tiempo. Más tarde pasa a trabajar en una pastelería, para encontrar, más tarde, un trabajo más acorde con su capacidad, en la Compañía Iberoamericana de Publicaciones (CIAP) editorial prestigiosa donde conoce a intelectuales y tiene ocasión de mostrar sus escritos. Empujada por la CIAP, que podría considerarse un antecedente de Planeta, Carnés es catapultada al éxito editorial. Conoce a un prestigioso dibujante Ramón Puyol, con quien se casa.
Puyol es uno de los mejores dibujantes de la época, tiene relación con el PCE y gracias a él, Luisa contacta con esta formación política y con los intelectuales de la época. Nace poco después su único hijo. Publica una compilación de novelas cortas, Peregrinos del Calvario, que obtiene buena crítica lo cual le anima a seguir publicando.
La editorial para la que trabaja y en la que ha cimentado su éxito, quiebra en los años treinta (empujada por el desastre bancario del 29) y ambos cónyuges se encuentran sin trabajo y con un bebé de meses. Marchan a Algeciras, de donde es Puyol y su estela desaparece durante un tiempo. Regresan a Madrid y Carnés comienza a trabajar en un salón de té, especie de pastelería típica de la época. Es un duro trabajo de diez horas diarias siete días a la semana. Es allí de dónde saca la inspiración para escribir su novela más prestigiosa, Tea Rooms.
Desde siempre ha tenido preocupaciones sociales, sobre manera por las condiciones del trabajo femenino, pero es en el contacto con los intelectuales de la época donde toma conciencia social, acercándose al PCE, como decimos, aunque jamás militó y comienza su colaboración con la prensa. Toda su obra se caracteriza por la combatividad social, tanto las novelas que realiza (diez) como los más de sesenta relatos, obras de teatro y artículos en prensa.
Muestra un gran apoyo a Clara Campoamor https://www.lapajareramagazine.com/clara-campoamor-y-sus-origenes-cantabros en su defensa del voto femenino y también a la República. Durante la guerra comienza a escribir y a representar obras de teatro (teatro de urgencia, lo llaman) en colaboración, alguna de ellas, con Alberti.
Escribe en diversos medios de prensa tanto independientes (en la medida de que en plena guerra hubiera medios no partidistas) y también en los cercanos al PCE (Mundo Obrero). Se divorcia de su marido y entabla una nueva relación con el poeta y escritor Juan Rejano.
Durante la guerra, sigue al periódico Mundo Obrero hasta Valencia, para poco después trasladarse a Barcelona, desde donde emprende el exilio pasando la frontera siendo recluida en un campo de refugiados del sur de Francia del que la ayuda a salir Margarita Nelkenhttps://www.lapajareramagazine.com/margarita-nelken. Consigue reunirse con su hijo en París, juntos emprenden la travesía hasta Nueva York donde permanece poco tiempo hasta su traslado definitivo a México donde se reúne con Rejano.
En este caluroso país para los exiliados españoles colabora con La Prensa, El Nacional, Novedades, publica cuentos, la biografía de Rosalía de Castro, obras teatrales, novelas. Dirige la publicación Mujeres Españolas, boletín que aborda la situación de la mujer trabajadora. Critica duramente en artículos de prensa la firma de los acuerdos en 1953 entre España y EEUU, también se implica en contra de la financiación de la investigación sobre armas químicas. En todo momento mantiene la actividad tanto literaria como crítica que le es característica desarrollando una obra muy interesante.
Sigue escribiendo hasta su prematura muerte por accidente en México, el doce de Marzo de 1964, cuando la quedaba mucho qué decir. Luisa Carnés una escritora importante bastante desconocida.
Obra principal:
Tea rooms. Mujeres obreras. Editorial Hoja de Lata, 2016.
Trece cuentos. Editorial Hoja de Lata, 2017.
Rosalía. Editorial Hoja de Lata, 2017.
De Barcelona a la Bretaña francesa. Editorial Renacimiento, 2017.
El eslabón perdido. Editorial Renacimiento, 2017.
Rojo y gris. Cuentos completos I, Editorial Espuela de Plata, 2018.
De donde brotó el laurel, Cuentos completos II. Editorial Espuela de Plata, 2018.
María Toca
Querida María, te ha faltado Natacha que se ha editado hace poco en Renacimiento por Antonio Plaza
Gracias, por el apunte, Libertad.